RAZONES POR LAS QUE NO ESTAS BAJANDO DE PESO

15 RAZONES POR LAS QUE NO ESTÁS BAJANDO DE PESO

Te has portado súper bien, has seguido tu dieta al pie de la letra, te alimentas súper sano y cuando llega el momento de la verdad (la báscula), ¡no has bajado ni un kilo! Es más, chance hasta subiste. Puede ser muy frustrante, te entendemos pero las siguientes razones podrían ser las culpables.

1)No tomas agua

Seguro has escuchado miles de veces que para bajar de peso es necesario tomar muchísima agua. ¡Es cierto! así que ¿qué esperas para hidratar tu cuerpo con 2 litros al día?. Si la idea te parece aburrida, agrega unas rebanadas de limón o pepino a tu botella y te aseguramos que será mucho más fácil de beber.

2)Piensas que pasear a tu perro es suficiente

No, no lo es. Lo sentimos pero si quieres ver resultados tienes que ejercitarte diariamente (puedes descansar los fines de semana) por 30 minutos. Corre, retoma la bicicleta, camina por la mañana, spinning, aerobics, ¡hay miles de opciones para escoger!.

3)No cuidas tus porciones 

No porque el empaque diga que esas galletas son “light” significa que te puedes atascar. Todo tiene calorías, todo, hasta los productos dietéticos. Lo más importante cuando quieres bajar de peso es cuidar cuántas calorías consumes y cuántas estás quemando. Cuida tus porciones, investiga sobre las necesidades calóricas de tu cuerpo y consume un poco menos para ir quemando esos kilitos. ;)

4)Sólo haces cardio

Por supuesto que los ejercicios cardiovasculares son básicos para bajar de peso, pero para un cuadro completo, tienes que empezar a ejercitar tus músculos con un poco de fuerza (pesas, por ejemplo); no sólo acelerarás tu metabolismo, además reemplazarás grasa por músculo. :D

5)Te ejercitas con el estómago vacío 

Error fatal que deberías reconsiderar: 1) la energía de tu cuerpo vendrá de tus músculos y no de la grasa; 2)no rendirás al cien. Asegúrate de comer algo ligero antes de cualquier rutina (plátano con crema de maní, un puñado de nueces, fruta seca, etc.), verás un gran cambio.

6)Eliminaste un grupo de alimento por completo

¿No comes nada de carbohidratos o grasas?, a pesar de que podría parecer la mejor idea, resulta contraproducente pues creas una deficiencia nutrimental (tu cuerpecito necesita de todo tipo de alimentos) y cuando veas un pastel, pasta o pan, querrás devorarlo a como dé lugar y como te has estado limitando seguro te comerás más de tres piezas. Recuerda que la moderación es la clave de todo. ;)

7)No duermes lo suficiente

Cuando no descansas las 8 horas requeridas, tu cuerpo tratará de sustituir la energía que no tienes con comida. Seguro te la pasas hambrienta después de una noche de desvelo y tiendes a escoger la comida más azucarada posible (papas, donas, palomitas, chocolate, etc.) ¡No más! Crea una rutina para acostumbrarte a irte a la cama a cierta hora y ¡hazlo!.

8)No comes vegetales

De 5 a 7 porciones al día son necesarios. Están llenos de nutrientes y te mantendrán satisfecha por muchísimo tiempo, ¿qué esperas? ¡prepárate una  refrescante y deliciosa ensalada, ya!.

9)Usas ropa demasiado grande

Y entonces sientes que la tienes que llenar, ¡para nada!. Comienza a elegir tu talla o, mejor aún, una o dos tallas más chicas para inspirarte a entrar en esos hermosos jeans. ¡Ánimo!.

10)Eres adicta a los condimentos y toppings 

Nada más frustrante que haber comido ensaladas toda la semana y no haber bajado ni un kilo. Los aderezos y toppings que usaste podrían ser los culpables. En lugar de comprar aderezos súper grasosos, opta por un poco de aceite de oliva y balsámico o vinagre de manzana. También, ¡no llenes tu plato de crutones, reemplázalos por algo de fruta fresca o algunas almendras (23, ¡nada más!).

11)Te saltas el desayuno

Puede que pienses que te podrías salvar bastantes calorías ¡error!, cuando llegue la hora de la comida, estarás tan hambrienta que comerás todo lo que te pongan enfrente. Empieza con el pie derecho y come una pieza de fruta y mucha proteína, evitarás tener esos horribles antojos de media tarde.

12)Comes sin poner atención

Frente a la televisión, con tu celular en mano, leyendo, frente a la computadora, etc. ¡para, ya! podrías estar consumiendo muchísimo más de lo que deberías por no concentrarte en lo que comes. Siéntate, relájate y enfócate en comer. Disfruta cada bocado, mastica bien y verás que con muy poco te sentirás más que satisfecha. ;)

13)Tomas mucho refresco

Aunque sea “light” el refresco es súper malo para tu cuerpo en general y todos los endulzantes artificiales que contiene no deja que bajes de peso. ¡Dile adiós por tu bien!.

14)No comes lo suficiente

No se trata de morir de hambre, si comienzas a sufrir es porque no estás comiendo lo suficiente y tu cuerpo comenzará a guardar toda la grasa que sea necesaria para evitar colapsar, además de que tu metabolismo se volverá lentísimo. Como dijimos, debes conocer las proporciones adecuadas para que todo funcione a la perfección.

15)¡Relájate! 

Estar estresada todo el tiempo hace que tengas un antojo por comidas grasosas y azucaradas. Si siempre estás en tu escritorio comiendo miles de donas, pizza, papas fritas, etc. ¡Date un break! camina, sal con tus amigas, platica y respira.